NI PRI NI PAN… NADA PARA NADIE

El proceso electoral 2010 está por iniciar y los partidos políticos deberán, como nunca, presentar a sus mejores opciones para los diferentes cargos de elección popular.
El PRI jugando el papel más cómodo, el de oposición, enfrentará en esa condición por primera vez un proceso electoral local. Con su media docena de suspirantes el tricolor deberá no solamente conciliar todos los intereses de todos sino también no darse el lujo de perder el liderazgo de ninguno de ellos. Todo esto al margen de la inédita posibilidad de abanderar a un candidato que vendría a ser propuesto por otro partido político pero con su respaldo a través una alianza partidista, quedando fuera el abanderamiento de alguno de esos seis aspirantes, al menos para la silla presidencial.
La situación priista deberá quedar solucionada con la operación política que se haga al interior, no hay de otra.
Por su parte, en el PAN se van ya haciendo a la idea de que un joven los abanderará, siendo su carta mejor posicionada, sin que esto signifique que represente una buena oposición a un priismo en auge, refrescado y sediento de recuperar lo perdido.
El panismo isleño deberá cuidar que su rebaño no se confunda y que privilegie la idea la continuidad, contraria a la intensión que ya tienen algunos panistas colaboradores que ya se dan por “muertos” y han decidido emprender otros proyectos, incluyendo el sumarse al proyecto priista.
Finalmente, ninguna de las dos fuerzas políticas tendrán algo seguro por dos grandes razones: primero, dependerá del éxito de su operación política de sumar voluntades y grupos. Segundo: los isleños se han vuelto cada día más analíticos y apoyaran de manera definitiva a quien les guste.
Sin tanto análisis, la gente de isla llevara a la silla presidencial a quien le agrade y tenga apego con su gente, lo que ahora vendría a darle la ventaja al PRI, es decir, volveríamos a ver que el pueblo apoyará a la mejor propuesta, independientemente del partido del cual provenga.